Son Serra de Marina es una pequeña y tranquila urbanización costera situada en el norte de Mallorca, dentro del municipio de Santa Margalida. Destaca por su ambiente relajado y su playa virgen, perfecta para desconectar y disfrutar de la naturaleza en estado puro.

En la entrada del pueblo encontrarás el Talaiot de sa Nineta, un asentamiento prehistórico que forma parte del patrimonio arqueológico de la isla. Este vestigio de la cultura talayótica, es testimonio de la presencia humana en la zona desde hace miles de años y un punto de interés para los amantes de la historia.

A diferencia de otros destinos más concurridos, Son Serra de Marina conserva un carácter auténtico y sin grandes edificaciones turísticas. Su extensa playa, es un lugar privilegiado tanto para el baño como para la práctica de deportes acuáticos como el surf, el kitesurf y el paddle surf, gracias a las condiciones del viento y el oleaje en ciertas épocas del año. Además, desde aquí se puede acceder a la playa de Sa Canova, un extenso arenal virgen protegido, ideal para largas caminatas junto al mar.

Si se camina en dirección a Can Picafort por la playa, se accede a la finca pública de Son Real, un paraje natural protegido de gran valor ecológico e histórico. Esta extensa finca alberga pinares, dunas y restos arqueológicos, incluyendo una necrópolis talayótica situada junto al mar. Sus calas escondidas y aguas cristalinas invitan a una pausa para disfrutar del entorno en plena naturaleza.

A principios de agosto, Son Serra de Marina celebra sus fiestas patronales, un evento que reúne a vecinos y visitantes en una programación de actividades tradicionales, música en directo y eventos culturales que reflejan el espíritu acogedor del pueblo.

Son Serra de Marina también es un destino gastronómico destacado. A pesar de su tamaño, cuenta con restaurantes y locales donde se pueden degustar mariscos y pescados frescos, además de una variada oferta gastronómica que incluye sabores internacionales.